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El Grupo Social Lares y la Red de Atención a las Adicciones, UNAD, han iniciado un proyecto de colaboración para establecer un diagnóstico sobre cómo afectan las adicciones a las personas mayores. Esta radiografía, con perspectiva de género, pretende arrojar luz sobre la situación del colectivo en todo el Estado
Para las estadísticas oficiales, los problemas de adicción terminan al cumplir los 65 años. No hay datos sobre cómo siguen su vida estas personas, afectadas en mayor o menor grado, por problemas de consumo. Por este motivo, el Grupo Social Lares y la Red UNAD ponen en marcha un nuevo proyecto para dar visibilidad a esas personas y a su problemática. Este proyecto de investigación, que se desarrollará en toda España, cuenta, además, con un elemento innovador: el tratamiento de estos datos desde una perspectiva de género.
“En la actualidad, no existen datos desagregados por hombre y mujer y, por lo tanto, se oculta cómo estas personas se enfrentan a sus realidades. Los datos indican que las mujeres tienen una mayor esperanza de vida y, por ello, queremos averiguar cómo este hecho influye en su calidad de vida, entre otros aspectos”, explica Juan Ignacio Vela, presidente nacional de Lares.
Las entidades promotoras del estudio son expertas en sus respectivos campos, en el caso de UNAD en el ámbito de las drogodependencias y sus efectos, mientras que el Grupo Social Lares es referente del sector del cuidado de mayores y dependientes. Ambas, ponen al servicio de este acuerdo toda su experiencia y recursos para lograr realizar una radiografía, lo más aproximada posible, a la realidad de estas personas.
El plan integra la realización de entrevistas a casi medio centenar de personas, mayores de 65 años con problemas de adicciones, que vivan en residencias o en entornos domiciliarios, de toda España objetivo es claro: investigar la relación existente entre personas mayores en riesgo de exclusión social y su relación con las adicciones.
Primeros pasos
El proyecto, que se desarrollará durante el 2022, comenzará con la reunión de la Comisión de Género, integrada por personas expertas en perspectiva de género encargadas de la redacción y planteamiento de los cuestionarios que servirán como base de todo el programa. Además, se va a realizar un spot publicitario para dar difusión a la idea y poner el foco en el primer estudio que disgregará sus resultados por género, para ver cuál la situación de las mujeres en España. Una vez realizadas las encuestas, tanto a personas mayores como a sus familiares, se procederá a la elaboración de un “Documento de buenas prácticas” que se presentará a finales de año.
Este ambicioso proyecto, que cuenta con financiación del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, es pionero en aportar una visión real sobre las adiciones más allá de la edad de jubilación, por el enfoque de género que se aplicará al estudio.