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La Federación Española de Técnicos Ortopédicos (FETOR) emite un comunicado en el que se expone la situación y problemática de las ortopedias.
La voluntad de servicio que siempre ha caracterizado a la ortopedia se está demostrando una vez más durante esta crisis del coronavirus, con acciones e iniciativas que no dejan lugar a dudas sobre el compromiso y la implicación de los técnicos ortopédicos por servir y atender a los pacientes, ya sea en sus propios establecimientos o incluso desplazándose a centros hospitalarios, residencias o domicilios particulares donde se requiere de su intervención profesional.
Declaradas como unos establecimientos sanitarios considerados esenciales en el Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, las ortopedias permanecen abiertas para atender al público, aunque también denuncian la falta del material de protección adecuado para desempeñar su labor. “Como profesionales sanitarios, atendemos pacientes que necesitan mantener y mejorar su autonomía y calidad de vida, algo siempre importante pero más si cabe en este contexto actual. Desde una persona amputada hasta una en silla de ruedas, pasando por una variada lista de posibles necesidades… Los técnicos ortopédicos somos un colectivo de profesionales sanitarios muy importante para una gran parte de la población, pero nos sentimos desatendidos en muchos sentidos en medio de esta crisis”, afirma Jaume Reixach, presidente de FETOR.
Además, en el marco de esta crisis, las ortopedias se encuentran en una situación delicada y compleja, pues el hecho de permanecer abiertas al público cuestiona la posibilidad de solicitar las ayudas económicas y ERTEs anunciadas por el Gobierno. Al respecto, Reixach afirma que “en nuestro sector, donde predominan las pymes, microempresas y autónomos, esto compromete seriamente la viabilidad y el futuro de muchas ortopedias. Además, la ausencia de prescripciones del CatSalut al no haber visitas médicas, unido a la ausencia de pacientes privados a causa del confinamiento, hace que las ventas en estos días sean casi anecdóticas”.
Desde FETOR se insiste en “la voluntad incuestionable de las ortopedias de atender a los pacientes durante esta crisis, por encima de todo y como primer objetivo. Pero también reclamamos que las ortopedias que lo justifiquen y acrediten puedan acogerse a las mismas medidas que el Gobierno pone a disposición de las pymes y autónomos de otros sectores. Sin temor a exagerar, diría que de no ser así muchas ortopedias se verán obligadas a cerrar”.