Empresas Premium
La población envejece de manera distinta, por eso, se requieren diferentes especialidades para atender a las diferentes etapas. Una formación en la que ya está trabajando la startup Qida.
La sociedad está alcanzando edades que eran impensables en épocas anteriores. España alcanzará un nuevo récord y será el país con más ancianos del mundo en el 2040 llegando a superar en longevidad a los tres primeros de la clasificación: Japón, Suiza y Singapur. En 20 años, la esperanza de vida será de 85,8 y los octogenarios podrán superar la cifra de cuatro millones. Este incremento de la esperanza se debe a la mejora en la calidad de vida y, sobre todo, a los avances de la ciencia.
Un poco más cercano al presente, en 2033 habrá 2,4 millones de habitantes más que ahora, pero una de cada cuatro personas, tendrá más de 65 años. Y se calcula que el 12% de esa población, casi seis millones de personas, vivirán solas. Una población cada vez más envejecida hace evidente que el sector sanitario será el motor de la ocupación, un filón de empleo que necesita a profesionales cualificados.
Dentro de este contexto, desde Qida apuntan que "habrá cada vez más personas que padezcan algún tipo de enfermedad o dependencia, condición por la cual van a necesitar asistencia. En la actualidad, no envejecemos igual que antes, lo que requiere cada vez más especialidades para dar respuesta a las distintas etapas". Por eso es necesaria una preparación de los cuidadores, una formación con la que ya se trabaja según cuentan desde Qida : "Hay un apoyo continuo para los cuidadores, tienen conexión con otros profesionales para ir haciendo avaluaciones continuas y hacen formaciones". De esta manera, además de ofrecer un servicio a aquellos que más lo necesitan, también contribuyen a mejorar la reputación que hay de estos profesionales. Qida ya ha empezado a participar en iniciativas de formación.
Y dando un paso más hacia la estrategia de preparar a las trabajadoras, Qida ha lanzado un programa de formación específico para sus cuidadoras de la mano de profesionales líderes del Hospital Universitario de Bellvitge. En colaboración con un equipo de enfermeras de prestigio de Catalunya, el próximo 16 de mayo formaran las primeras 50 cuidadoras.
Para asegurarse que ofrecen un buen servicio, la empresa hace un estudio previo para aconsejar el nivel de atención y los servicios necesarios para mantener el bienestar que necesita la persona dependiente. Su rol es seleccionar a los mejores profesionales y entender a las familias para ofrecer los perfiles que más se adapten a cada caso.
Porque a pesar del optimismo en cifras, muchas veces se crea un trabajo precario, por eso en esta empresa trabajan para devolver la reputación a los cuidadores. Su filosofía es que un cuidador bien retribuido y formado estará más satisfecho y ofrecerá un mejor servicio.
Desde Qida explican que "ahora la geriatría empieza desde el día siguiente de jubilarse. Envejecer bien depende, en parte, de nosotros mismos asistiendo a talleres de memoria, centros de convivencia o fisioterapia. Por eso, es importante tener a profesionales especialistas que aconsejen lo que va mejor según el momento en el que nos encontramos".
Y sobre todo debemos cuidarnos en cada etapa de la vida, porque la conducta y el comportamiento puede aumentar hasta en 15 años la esperanza de vida.