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El nuevo presidente, que sustituye en el cargo a Eduardo Rodríguez Rovira, es actualmente presidente de ISS Facility Services en Iberia, empresa que forma parte del Patronato de la Fundación Edad&Vida desde diciembre de 2004.
El Patronato de la Fundación Edad&Vida, instituto para la mejora, promoción e innovación de la calidad de vida de las personas mayores, ha elegido este lunes a Joaquím Borrás como nuevo presidente. Borrás sustituye en el cargo a Eduardo Rodríguez Rovira que, tras finalizar su mandato, pasará a presidir el Comité Asesor de la Fundación Edad&Vida.
Nacido en Barcelona, Borrás estudió Ciencias Empresariales en ESADE y participó en un programa internacional de Management en Hautes Études Commerciales (HEC) en París y en la MC Gill University de Canadá. A sus 60 años, es presidente de ISS Facility Services en Iberia, empresa que él mismo creó en 1999 y que integra a más de 50 compañías, empleando a más de 36.000 personas (1.500 con discapacidad o en riesgo de exclusión social) en España y Portugal. Además, es presidente del Consejo Asesor de ISS Facility Services y de la Fundación ISS Una Sonrisa Más. Anteriormente, fue director general para Iberia de Nilfisk Advance, empresa fabricante de equipos de limpieza profesionales.
Con una larga trayectoria en el mundo de la empresa, Borrás ha estado siempre muy vinculado al mundo de la Responsabilidad Social Corporativa (RSC). En este sentido tiene una máxima: “Para que las personas sean felices deben estar motivadas y sentirse capaces”.
Ese lema también lo aplica a las personas mayores. De hecho, ha promovido el desarrollo de políticas de mejora profesional para este colectivo dentro de sus organizaciones y es miembro del consejo asesor del Club de la Excelencia en Sostenibilidad; miembro de la junta directiva de ACG (Association for Corporate Growth) y, desde 2013, miembro del Patronato de la Fundación Escoles Garbí.
Fiel al espíritu y al legado de Higinio Raventós, fundador de Edad&Vida, y al trabajo realizado por Eduardo R. Rovira, Borrás se plantea el envejecimiento de la población como un desafío, una oportunidad para dar respuesta a los retos económicos y sociales que supone el hecho de hacerse mayor, una realidad para la que todavía se precisa mucho trabajo y colaboración entre el sector público, la iniciativa privada, las organizaciones de mayores y las sociedades científicas y universidades.
Para Borrás, “la persona mayor se ha ganado el respeto de la sociedad, tras contribuir a su mejora durante muchos años”. “Se merece más cuidados sanitarios, mejores servicios residenciales, asesoramiento y ayuda económica, alimentación cuidada, socialización, facilidades de movilidad, comunicación, protección, ocio… Estas son nuestras prioridades en este momento”, ha asegurado.